Tarja: Castro Urdiales Dia 1

Te encuentras en casa conversando con tu madre, parece que fuese ayer pero ya llevas 2 semanas en Castro Urdiales, el lugar te ha encantado la comida, la calidad de las personas, el hecho de poder estar con tu madre son cosas que te han hecho pensar que tal vez Castro es mas que un lugar de veraneo.
¿Cuándo piensas volver? –pregunta tu madre mientras toma un sorbo de su tasa de café.
Aun no lo tengo claro, por ahora los contratistas no me han contactado.
La conversación fluía de manera muy natural, hasta que dieron las 10 pm y tu madre quiso retirarse a dormir, por supuesto tu no tenias ni la menor intención de hacerlo, así que subiste a tu habitación tomaste la ropa que tanto te gusta y te acicalaste para salir, justo en la puerta te devuelves y tomas tu morral con el arco y flechas que llevas a la competición, después de la noche con el niño prefieres no salir desarmada.
Es noche de domingo, la ciudad no está muy despierta que digamos, así que tomas un taxi para que te lleve a la zona de bares de la ciudad, no sabes bien por qué, ya que no eres de las que toman, pero quieres ver personas y pasar el rato.
Llegas a un bar el cual te da buena pinta, ingresas en él sin mucho problema y te sientas en la barra, le pides al barman una cerveza bien helada y te la tomas calmadamente mientras observas sin mucho cuidado las personas en el establecimiento, estás bastante cómoda la música es de tu agrado y el sabor de la cerveza es especialmente agradable de hecho al contrario de lo que pensabas ningún molesto hombre se te ha acercado a hablar, en pocas palabras estas pasando bien, te terminas tu segunda cerveza ya estas lista para regresar a casa, sin mucho preámbulo sales del lugar sin prestar atención a las miradas indiscretas de los hombres en las mesas vecinas.
Te diriges al acopio de taxis del lugar y abordas uno. No le das ninguna indicación adicional al taxista diferente de la dirección de tu casa ya que no conoces la ciudad así que te da igual la ruta que decida llevar el taxista. Sin embargo, te percatas que ya ha pasado más tiempo en el recorrido de regreso a casa que en el mismo cuando saliste al bar horas antes.




La ciudad es nueva para ti pero no por eso te pasa desapercibido el hecho que cada minuto que pasa, la calle esta mas sola, de hecho podrías afirmar que te encuentras cerca de un sector industrial, te empiezas a preocupar y a exigirle al conductor que de vuelta y te lleve a tu verdadero destino, es entonces cuando ves con claridad, estás viendo a través del retrovisor del coche para poder ver la cara del conductor sin embargo en el espejo sólo se puede ver la silla vacía del conductor, de inmediato giras la cabeza y ves el cuerpo del taxista bien definido. ¿Qué rayos está pasando aquí?-ese pensamiento pasa por tu mente a una velocidad increíble, sin embargo no tienes tiempo de meditarla de repente el taxi frena lanzándote hacia adelante, como puedes bajas del vehículo estas en una zona de bodegas, solo hay una luz que proviene de una lámpara en la esquina, el conductor del taxi y otros dos tipos que aparecieron de la nada se acercan a ti puedes ver claramente unos colmillos enormes que brotan de sus mandíbulas.
Estos no son hombres pero para tu sorpresa uno de ellos emite unos sonidos que en principio no entendías pero luego te fue absolutamente claro, el demonio gritaba “No dejen escapar a la hija de Swartz”

Me encanta el sitio, hacia mucho que no me habia sentido tan bien, bueno si cuando mi padre estaba vivo. Sonrio a mi madre mientras me pregunta

-Mama, parece que no te gusta que este aqui- digo medio embroma con un leve acento nordico y melodiosa voz dejando la taza del cafe a un lado - Cuando tenga que volver, volvere, no me ha llamado mi agente, asi que puedo seguir de vacaciones.
Tras un largo rato decide irse a dormir y la despido con un beso en la mejilla como siempre antes de ir a mi cuarto para arreglarme un poco mientras pienso en si deberia ir con mi primo la proxima vez "Es bastante majo, aunque se toma demasiado enserio su trabajo como policia" Tras mirarme al espejo sonrio ante el efecto causado, realmente no se como puedo ser sueca y no ser rubia, milagros de la genetica por lo que parece y con lo que siempre me rio cuando me preguntan. Cojo y me pongo el tres cuartas de cuero sobre la ropa para tapar un poco la falda mientras termino de coger la bolsa con el arco "Que raro, ya no salgo sin ello despues de lo de aquel callejon y eso que no me volvio a pasar"
Salgo a la calle y camino un poco antes de coger un taxi y darle la direccion del bar, me llevo mi primo alli el primer dia y la verdad necesito ver a mas gente y sentirme humana por una vez, no como me siento desde hace algun tiempo. Cuando entro en el bar, no miro a nadie en particular, se que suelo llamar la atencion con mi estatura y mas llevando tacones o la ropa que suelo llevar para salir. Camino a la barra y dejo la mochila sobre uno de los taburetes mientras me quito el chaqueton y lo dejo sobre ella para sentarme. Le pido al camarero una cerveza helada, no esta mal aunque en Suecia solo tomar vodka cuando salia si tenia ganas despues del entrenamiento y no era muy amenudo. Alguien se acerca a la barra pero no me dirige ni una palabra, eso esta bien, tras un rato en que me tomo la bebida con tranquilidad, le pago y me levanto poniendome de nuevo el abrigo y cogiendo la mochilla.
Camino con suavidad mientras mi perfume me envuelve saliendo de cada uno de mis poros, se que los hombres me estan mirando mas que al partido de futbol o al de pelota vasca que hay en la television, no me importa, estoy muy acostumbrada a ello.
Al salir el frio aire del mar me golpea en la cara y me recuerda a las salidas al glaciar cercano a esquiar de pequeña, el olor del mar me recuerda que ya no estoy en casa. Respiro hondo mientras me echo la mochila al hombro y camino hacia la parada de taxis, cojo el primero de todos es algo que me han tenido que enseñar y que no entiendo muy bien. Dejo la bolsa a mi lado y le doy al taxista sin mirarle la direccion de casa de mi madre Mañana en cuanto me levante me ire a practicar un poco si no quiero perder la forma en el caso de que vaya a las olimpiadas este año.
No me doy cuenta hasta un rato despues en que al fijarme en el exterior veo que no es el camino o al menos eso me parece, ademas el echo de no ver a mucha gente por alli aunque sea domingo no me parece muy halagueño.

-Disculpe, creo que no es este el camino- digo incorporandome mirando al exterior primero y luego al retrovisor al no escuchar respuesta, no hay nadie ¿que demonios ocurre aqui? giro el cuello y veo al taxista, todo su cuerpo alli, pero en el retrovisor no se ve nada. Mi brazo instintivamente se dirige a la bolsa para cogerla y atraerla para mi cuando noto el frenazo haciendo que mi cuerpo trace un arco que me lanza contra el asiento de delante haciendo que durante unos segundos pierda la respiracion. ¿Donde estoy? me llevo la mano a la cabeza sacudiendola y abro la puerta para salir fuera, parece una zona de naves y no hay mucha luz aunque yo veo bien una ventaja de entrenar hasta tan tarde.
Oigo un ruido y me giro para ver que hay dos mas que han salido de solo Dios sabe el lugar, sus colmillos me recuerdan a aquella noche y doy un paso atras mientras intento mantener la distancia y escuchar lo que dicen provocandome el asombro ¿Papa? ¿por que? no me quedo alli a esperar su respuesta intento alejarme lo suficiente mientras saco el arco y cargo una flecha para poder dispararles, necesito protegerme de ellos cuando los haya inmovilizado sabre....Me cuesta sacar un poco el arco pero no creo que tarde mucho, lo peor son los tacones, esto me pasa por querer salir tan guapa por la noche.

Escena 2

Sientes miedo, tu corazón palpita con fuerza y tus manos sudan sin control, no sabes de donde salieron los otros dos “seres” y más importante, aun no sabes dónde te encuentras. Haces lo posible por correr y así escaparte de ellos, aunque la combinación de tacones altos mas el arco atascado en la bolsa hace que tu recorrido sea algo mucho más lento de lo esperado.

Después de un par de metros logras sacar el arco de la bolsa aunque este no se encuentra listo para ser usado, conocedora que es un arco retráctil debes activarlo primero así que tomas con fuerza la empuñadura y con un rápido movimiento haces que pase de su forma retraída al esplendor que muestras en las competiciones internacionales, de manera simultánea cargas una flecha, te encuentras lista para atravesar a uno de estos demonios; es entonces cuando vuelves a centrar tu mirada en ellos y con horror ves que se han movido a una velocidad mas allá de la humana, en cuestión de unos segundos han logrado rodearte, das un par de pasos hacia atrás y con horror te encuentras con una pared la cual te detiene, das una rápida mirada para comprobar la situación. Frente a ti se encuentra el que minutos antes manejaba el taxi, a tu derecha está el que grito el apellido de tu padre y a la izquierda está el tercer demonio.

Escena 3

Sostienes el arco con fuerza con tu mano izquierda mientras con la derecha tensas la cuerda con una flecha que has logrado sacar de la bolsa, apuntas al “sujeto” de la izquierda pues a tu parecer es el más cercano, pero algo sucede, justo en el momento que soltabas la flecha ves con horror como esta arde en llamas, la escena te causa tal impresión que sueltas el arco en el acto haciendo que este caiga al suelo y que la flecha pierda dirección; con todo el proyectil se incrusta en el hombro derecho del “ser”, haciendo que este se tire al suelo mientras se retuerce del dolor. Los sonidos que genera son demasiado extraños casi como si no fueran humanos, te giras horrorizada por la escena y puedes ver como algo negro “una flecha negra” vuela
contra ti, de un hábil movimiento la esquivas y compruebas que dicha “flecha” en realidad es como una substancia negra que se disipo al instante.

El demonio que grito el apellido de tu padre tiene una especie de brazos que le salen de la espalda hecho de la misma sustancia que la flecha anterior, mientras que el que manejaba el taxi ha transformado su brazo derecho en lo que parece una “espada” de hueso, ambos te miran con desprecio y se preparan para el ataque.

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Recuerda que tu personaje aun no sabe nada de la caza, primero le conseguiremos un tutor que le enseñe como controlar la via ignis, y luego la podras usar a placer.
No te desesperes todo esto es mientras ubicamos bien tu venganza y el mentor.

Apunto y al ir a disparar la flecha se incendia haciendo que no solo me sorprenda sino que tambien pierda la concentracion y suelte el arco con el consabido problema de que la flecha no llega a donde yo esperaba sino que se clava en su hombro haciendo que grite.

"No es humano, esos gritos no lo son" giro la cabeza para no seguir viendo el dantesco espectaculo cuando veo algo que se dirige hacia mi, no se como pero lo consigo esquivar, al pasar a mi lado veo que no tiene forma fisica y que se disipa en el aire como una voluta de humo. Mi respiracion comienza a acelerarse poco a poco mientras intento buscar una forma de escapar de alli.

Vuelvo a centrarme en mis atacantes, solo veo a dos de ellos, me imagino que el tercero habra desaparecido para poder quitarse la flecha del hombro. NO me parece halagueño que un de ellos tenga algo que le sale de la espalda de esa sustancia negra "la proxima vez te quedas en casa, esto cada vez es mas raro. Papa, ¿que quieren de mi?" El otro una espada de hueso de su mano, parece una mala pelicula de serie B y yo solo tengo el arco para protegerme de su ataque, ademas ahora esta en el suelo a mis pies. Si lo cojo puede que me quede desprotegida pero es lo unico con lo que podria pararles, quiera que ese fuego no le haya dañado la cuerda por que no tengo una de repuesto. Respiro hondo y solo unos segundos despues me lanzo a por el arco en una voltereta para poder salir corriendo por un hueco que tenga, no tengo flechas, se quedan en la mochila, realmente es una noche que prefiero no repetir.

Completas un giro completo de tu cuerpo en otros lugares llaman a este movimiento “vuelta estrella”, mientras recoges el arco del suelo, una ves terminas corres tan rápido como tus pies te lo permiten para poder escapar de tan bizarros seres, es tal tu estado actual que olvidas que el demonio al que heriste hace un momento se encontraba en esa dirección; continuas corriendo hasta alcanzar la esquina de la calle, es entonces cuando sientes como algo te sujeta las piernas y te hace caer, el golpe que te das en la cara es fuerte ya que caes de bruces contra el pavimento, tratas de reincorporarte cuando sientes un liquido caliente y de sabor metálico recorriendo tu boca, no necesitas ser doctora para saber que es tu propia sangre; en la caída lanzaste sin querer el arco a varios metros de tu posición, por lo tanto no te es fácil de alcanzar en un momento como este, mientras confirmas con horror que lo que te sujeto las piernas fueron esos extraños brazos que le salen a uno de los demonios.

-Elimínala de una vez, ya bastantes problemas nos a traído.-

El demonio que te esta sujetando de un salto acrobático con el cual se eleva varios metros en el aire y cae con fuerza sobre tu abdomen, el golpe fue tal que lo único que pudiste hacer fue escupir sangre a causa del impacto, dicha sangre salpico un poco al demonio, estabas tratando de recuperar el aire perdido de tus pulmones cuando sientes su mano sobre tu boca limpiando la sangre que te corría para luego con una expresión placer infinita lamerse los dedos para probar tu sangre.

-Yo también quiero, es mi derecho, la sangre de Swarts me corresponde tanto como a ti.-

No puedes moverte y el peso de ese demonio sobre tu abdomen no te permite respirar muy bien, es como tener una camisa de fuerza 10 tallas menor a ti, con todo aun estas en condiciones de pelear he intentas quitártelo de encima, moviendo frenéticamente tu cuerpo,
justo en ese momento sientes un horrible martillazo en tu rostro seguido de una risa siniestra, ese demonio acaba de abofetearte con tanta fuerza que por poco pierdes el conocimiento, tratas de recuperarte del golpe y asi tratar de quitártelo de encima cuando sientes otra y otra en total te golpea en tres ocasiones.

Sangras tanto que incluso se escurre por tu rostro hasta el pavimento, agotada y sin fuerzas dejas de luchar, sientes como respirar se te hace una tarea muy difícil con ese sujeto sobre ti y con la cantidad de sangre que brota de tu nariz, entonces el demonio se acerca lentamente a tu rostro en una mueca de victoria, jurarías que pretendía besarte
pero en último minuto se desvía hacia tu oído izquierdo, -Tu padre nunca debió meterse con nosotros, me divertiré contigo un rato mas, luego iremos hasta tu casa y nos encargaremos que tu madre tenga una muerte lenta y dolorosa, tu padre no debió meterse con nosotros- poso su mano con fuerza sobre tu rostro y te obligo a girarlo, mientras con la otra mano aparto el cabello que cubria tu cuello, y lentamente se acercaba a el mientras abria la boca mostrando unos enormes colmillos.

Aunque te cuesta entender lo que pasa puedes sentir las puntas de esos colmillos sobre tu piel mientras unas gotas de su saliva caen sobre ti, entonces algo sucedió, de repente y ante tus cansados ojos ves como el demonio sale volando y se estrella contra una pared, el otro demonio atónito al ver lo que paso levanta la espada y la intenta blandir en tu contra, sin embargo, el también sale despedido varios metros hacia atrás, no comprendes nada pero de repente puedes ver a una mujer de cabello largo rubio, con un traje negro y rodeada de fuego pero dichas llamas al parecer no la tocaban.



La mujer extiende su mano derecha hacia un costado mientras cierra el puño, al hacerlo una especie de luz plateada sale de su mano en una fila hebra que comienza en su mano y se extiende hacia arriba de ella, lo que en un principio parecía una vela, luego se fue extendiendo hasta tomar la forma de una espada pesada de acero como esas de las películas de la edad media, sin mas dicha espada empezó a arder en llamas, los demonios miraban a la extraña mujer bastante sorprendidos, nunca imaginaron que los esperaría alguien como ella en un lugar como este; el demonio con la espada de hueso se lanzo en
su contra pero al chocar su espada con la de la mujer esta se partió y de un hábil movimiento de la mujer separo en dos partes a el demonio, la sangre brotaba de su interior en todos las direcciones posibles, sin duda algo difícil de ver; por su parte el otro demonio aprovecho el descuido para huir de la escena, lo trataste de seguiste con la mirada hasta
que tus ojos lentamente comenzaron a cerrarse, estabas mal herida y demasiado cansada
tu cuerpo exigía un descanso y no estabas en condiciones de negarle tal petición.


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Lentamente abres los ojos tratando de no moverte mucho ya que hacerlo te causa dolor, das un vistazo y notas en seguida que no estas en tu casa, por el contrario te encuentras en un lugar que no habías visto nunca en tu vida.

to nunca en tu vida.

Sonrio al levantarme y correr pero al notar que caigo desequilibrada al suelo no me da ni tiempo a amortiguar el golpe, simplemente caigo. Me duele, noto sangre en mi boca, puede que me haya partido algun diente o me haya mordido la lengua. Intento encontrar mi arco, pero esta lejos. Quiero cogerlo pero tiran de mi, me giran y le veo, esas cosas tienen vida propia y....
Lo siguiente que noto es el golpe por el salto de ese ser, sus rodillas se han clavado en mi vientre, el aire sale en un escupitajo llevando sangre y manchandole, manchandome el rostro, haciendo que chorre por la comisura de mis labios hacia mi barbilla hacia el cuello, al suelo. Huele a sangre
Lo siguiente que noto es el golpe por el salto de ese ser, es mi propia sangre, mis pulmones no tienen aire necesito respirar, su peso me lo impide. Noto su mano, su tacto me da nauseas, quiero que se quite de encima y que me deje, quiero irme de alli. Hablan de mi sangre, ¿por que? quiero que me dejen irme.


"Papa, que narices pasa aqui, por que nos odian, ¿que les
hiciste?"

Un golpe en mi cara y
lo siguiente que siento es como si me hubieran golpeado con un ladrillo, no
puedo casi respirar por la nariz, creo que me la ha roto y con autentica saña.
Intento que se aparte, pero es mas pesado que yo y ademas noto como mi cuerpo ya
no quiere responderme, siento que no hay fuerzas. Trago sangre en cada
repiracion, solo siento su sabor en mi garganta en mis pulmones. Cuando nombra a
mi madre siento que algo en mi interior arde, no la pueden tocar, quiero decir
algo pero solo consigo escupir mas sangre.

Su aliento en mi cuello, sus colmillos, su saliva
sobre mi piel.
"Papa, pronto me reunire contigo, siento
que..." Las lagrimas de mi rostro se mezclan con la sangre
y van al pavimento. De repente noto como me quitan un peso y al abrir debilmente
los ojos veo como ha salido volando de encima mio y que hay alguien mas alli con
nosotros, una mujer. Esta envuelta en llamas, rubia, vestida de negro, lo que
hace me parece un sueño o tal vez un deliro, lo unico que consigo decir antes de
desvanecerme es ¿Eres un
angel?

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No se cuanto estoy inconsciente, solo se que me duele el cuerpo,
me duele la cara y he soñado con mi padre, momentos de cuando era pequeña,
cuando ibamos al glaciar a tirarnos en trineo o me iba a ver a las estupidas
funciones de la escuela.

Creo ver luz un par
de veces y algo borroso al entreabrir los parpados pero no estoy segura, mi
mente me dice que duerma que mi cuerpo lo necesita y tal vez sea verdad. Cuando
despierto, me intento incorporar pero noto la presion de algo en mi pecho y el
dolor en todo el volviendo a tumbarme, me duele la cara. Me llevo la mano a la
nariz, me duele mucho demasiado, creo que esta rota y seguro que tengo el labio
partido sino algun hueso tambien. Miro a todas partes, no estoy en casa, me miro
y la verdad no llevo nada de lo que llevaba esa noche, un sueño si no fuera por
el dolor y por los pegotes de sangre que tiene mi pelo enredados entre sus
rizos. Cierro los ojos y los abro de golpe. Tengo que llamar a casa, tengo que
saber si mi madre esta a salvo, mi movil estaba en la chaqueta, la busco con la
mirada asi como la mochila y el arco...

Te incorporas lentamente en busca de tus cosas, sabes bien que entre tu ropa se encuentra el celular que tanto necesitas para constatar la salud de tu madre, la habitación en la que te encuentras luce como una habitación normal, con lo cual descartas estar en un hospital, puedes ver tus cosas en la esquina de la habitación, aunque no estás segura si l arco también está allí, tratas de levantarte por ellos, y es entonces cuando ves como la puerta de la habitación es abierta de par en par y una mujer joven de no más de 30 años, cabellos dorados y piel blanca como la nieve entra.
-Veo que ya tienes energías para levantarte, creo que ya podremos hablar, que tal si empezamos por que me expliques la razón por la cual esos sujetos te estaban intentando asesinar.

Me duele todo, me incorporo con una mano en las costillas. Intento levantarme pero no puedo aun, pongo los pies en el frio suelo con la mirada fija en el bulto que ahora son mis cosas. La puerta se abre y clavo mis ojos en ella. No conozco a la mujer que hay alli, es un poco mayor que yo, rubia y palida. La oigo hablar y sonrio llevandome la mano a la frente para echarme el pelo para atras.

-Creo que es una larga historia y ni siquiera lo se yo. Nombraron a mi padre y dijeron que tenian que matarme. No se por que mi padre solo era abogado, no creo que les metiera en la carcel ni siquiera hablaban sueco. TEngo que llamar a mi madre puede que este preocupada y llamaria a mi primo. TE agradezco que me ayudaras pero ayer pasaron cosas muy extrañas. Entre esos tios raros que me querian beber la sangre, que disparara una flecha de fuego y que luego viera lo que vi que hiciste. Creo que bebi algo que no era cerveza en ese local.
Una lagrima se desliza por mi mejilla mientras recuerdo a mi padre, era un buen hombre, haria daño a nadie. Nunca.

-No me he presentado soy Tarja Swartz, ahora si me dejas me gustaria irme a casa o a un hospital para que me miren si me he roto algo cosa que creo que ha sido asi.

La extraña mujer te regala una sonrisa de asentimiento que en las condiciones en que te encuentras es casi una bendición.

-Pero que descuidada soy-

De repente sin más se va caminando directamente hacia ti, se acerca a tu rostro con firmeza y determinación,
sientes dudas pues ella se está acercando como si quisiera besarte pero al momento de estar a escasos palmos de tu rostro se detiene, cierra los ojos mientras respira profundamente y contiene el aire en los pulmones, te toma de las manos para que no te muevas mientras lentamente expulsa el aire retenido y abre los ojos al mismo tiempo.


El aire que esta brotando de su ser es la corriente de aire más revitalizante que has sentido en toda tu vida, de
repente y para tu sorpresa, sientes como los dolores de tu cuerpo lentamente se desvanecen, los huesos rotos se recomponen y la piel lastimada se cura serrando las heridas que te hacían sangrar, al mismo tiempo sientes toda una ola de energía nueva que fluye por tu cuerpo, dejando en perfecta forma, te sientes con energías para 2 olímpicos consecutivos.

Al terminar la mujer te suelta las manos, y se aleja un poco para darte algo de espacio, -no creo que sea necesario que visites un doctor, aunque si lo prefieres no veo problema. Por cierto lo que viste no fue producto de una mala noche de copas, ni producto de tu imaginación, esos seres son tan reales como tú y como yo, pero ya hablaremos de eso, mi nombre es Anastasia Aballe encantada de conocerte-

Al ver su actitud me pongo tensa y mas al ver como se acerca a mi rostro "¿Que se cree que soy?, a mi no me van..." Estoy a punto de decir algo cuando noto como su aliento entra en mi haciendo que comience a sentirme mejor. Noto como las heridas se cierran como si nunca hubieran estado alli, los arañazos desaparecen como por arte de magia y el dolor de huesos tambien. Miro mis manos y las cierro un par de veces entre incredula y asombrada
-Gracias, no... digo mientras me levanto de la cama al apartarse y camino hacia mi ropa para buscar el telefono . Marco el numero de casa mientras espero que mi madre lo coja "Mama cogelo vamos es importante, no podre perdonarme si te hacen algo esos seres"
Miro a mi salvadora mientras espero -Anastasia, puede que no fuera producto de mi imaginacion, pero esa flecha se prendio, no se como pero lo hizo. No se que les hizo mi padre, no se por que me querian muerta, solo se que mi madre esta en peligro si es asi. Ni siquiera se que eran esos seres, mi mente dice una cosa y mi razon dice que es imposible que no es real, que no existen los vampiros

-Todo eso tiene explicaciones, y aunque no es momento de tocar el tema a fondo como debe ser te puedo decir que la flecha fue incinerada por tu poder, fue gracias a eso que mi visión pudo detectar que eres una cazadora y en cuanto a los vampiros, será mejor que lo empieces a creer, porque esos dos de ahora eran cadáveres bebedores de sangre.-


Mientras Anastasia habla te fijas en la hora en un reloj de la pared marca las 2 am, parece que no estuviste mucho tiempo inconsciente.


Ring… Ring… Ring…


-Alo, ¿Tarja eres tú?, ¿hija que son estas horas de llamar? ¿Te ha pasado algo?

Escucho a Anastasia cuando por fin descuelgan al otro lado y respiro aliviada
-Mama, si, soy yo deberias llamar al primo o ir a casa de la tia esta noche, no quiero que te quedes sola....No hay discusion yo ire mañana es que me he encontrado con una amiga y se me ha echo tarde para volver. Solo llamaba para no preocuparte, ahora haz lo que te he pedido por favor.


Cuelgo el telefono y lo dejo sobre la mesita que hay en la habitacion girandome hacia mi interlocutora y mirandola con mis ojo. Respiro hondo antes de abrir la boca para hablar

-Supongamos que te creo, solo supongamoslo. ¿Como soy capaz de crear fuego? ¿que es eso de ser un cazador? por que eso de la vision mas me parece a un rollo de la new age que otra cosa, aunque...despues de lo de aquella noche con aquel niño.

-Con que un asunto new age eh. Muy dentro de ti
sabes que lo que digo es verdad- te dice mientras toma asiento y cruza
las piernas en señal que va hacer una
conversación larga.


Pues resulta que este mundo esta en medio de la
inmundicia, cadáveres bebedores de sangre han esclavizado a la humanidad
durante cientos de años sin que podiesemos hacer nada, sus habilidades especiales los hacen muy peligrosos, cómo
pudiste comprobarlo esta noche, sin contar con el hecho que son inmortales y
además tiene la capacidad de transformar almas puras en engendros como ellos,
sin embargo, el creador a través de sus ministros o heraldos como quieras
llamarlos, se pasean entre la humanidad y despiertan a quienes ven con
potencial, nos dotan de lo necesario para hacer frente a este caos, ese momento
se llama exaltación, es el momento donde empiezas a ver la vida tal cual como
es, debes recordar ese día, el día en que comenzaste a ver el mundo con los
ojos de tu alma.

La miro con incredulidad, pero despues de todo lo acontecido la noche anterior me espero, no mas bien deseo que sea verdad todo lo que me esta contando. Busco un lugar donde me siento para esa conversacion.

--Un segundo, me estas diciendo que los vampiros existen desde hace siglos y que nos manipulan desde la sombra. Eso puede darme una idea de que los tres con los que estuve luchando a duras penas eran unos chupasangres como esos. Pero el resto no se parece sacado de ... ¿Hablas de Dios, de angeles?

Me llevo las manos a la cara y me echo el pelo hacia atras mientras miro al suelo alfombrado.

--En mi pais natal, una noche cuando volvi de entrenar, en un callejon vi algo. Un niño me ataco y le mate pero no se como no quedo ni rastro de el. ¿Como puedo ser una de esos elegidos si mate a un niño?.

-El enemigo tiene mil rostros, esconderse detrás de la imagen de un infante es algo común para esos parásitos.


Te dice mientras te regala una mirada de comprensión, se levanta de su silla y sale de la habitación por un momento, después de un par de minutos vuelve con 2 tazas de humeante café, té entrega una, vuelve a tomar asiento, agita el café con la cuchara y bebe un sorbo.

-no espero que asimiles todo en esta noche, el enemigo es poderoso y tienes razón en algo, los de hace rato no son sino el final de la cadena, enviados por alguien más; eso es claro por lo que me dices que hablaban de tus padres… parece que tienen interés en ti o por lo menos en tu familia. Hiciste bien en llamar a tu madre, seguramente irán por ella, pero ahora que está a salvo necesito estar segura que te puedes cuidar por ti misma, ¿cómo me dices que murió aquel chico?

Aunque sus palabras me reconfortan, mi mente y mi corazon me siguien diciendo que era un niño. Al darme la taza de cafe la cojo entre ambas manos y la miro antes de dar un sorbo pensativa.

--Del que mas hablaban era de mi padre, que se habia metido con ellos y que debia pagar por lo que habia echo. Es una locura, mi padre era abogado y murio de cancer cuando yo estaba compitiendo en las olimpiadas, dos dias antes de la final.
El niño o lo que fuera estaba atacando a alguien y al verme salto sobre mi, no se como lo hice, pero tenia una flecha en la mano, la cree de la nada, se la clave en el corazon, fue como tu con esa espada.

La miro como si ya supiera lo que me iba a decir, respiro hondo antes de volver a tomar otro sorbo de cafe manteniendome callada con los labios temblorosos.

--No se como lo hice, como tampoco se como provoque el fuego para prender la flecha, se defenderme si consigo mantener la distancia, soy buena con el arco pero no a esas habilidades no sabria sacarlas o simplemente volver a usarlas. Intente volver a crear una flecha y no pude...

Anastasia te regala una mirada de comprensión mientras bebe de tu taza de café.
--así que una cazadora sin interruptores… hace mucho no veía algo así—
Sus palabras no son para ti, es más como si hablara con ella misma.
--mira el motivo por el que te sigan es algo que no sabemos, sin embargo, por lo que dices me da pie a pensar que tu padre no era un simple abogado, hace algún tiempo investigo a un tal TONY, de esas investigaciones llegue a las bodegas donde te encontré, no estoy segura, pero si esos actuaban bajo sus órdenes me temo que tu padre se metió en un problema que no solo le causo la muerte sino, que las puso en peligro a Uds.
Por ahora será mejor que duermas ya es tarde y mañana será un nuevo día—
Se levanta del asiento mientras se despide cuando le suena un teléfono celular, al sacarlo y constatar quien la llamaba frunce el ceño y contesta.
--Anastasia… no… le perdí el rastro… donde… voy en seguida—
Cuelga el teléfono se lo mete en el bolsillo, toma la chaqueta que le viste en la noche y se arropa con ella.
--lo siento querida pero tendré que salir, si necesitas algo de la casa solo tómalo, no tengo inconveniente.--

Me parece chino lo que me habla o tal vez no entienda el español tan bien como creo. Esto me sobrepasa, niego ante su aseveracion.


--No, mi padre era abogado, yo he estado un millon de veces en su bufette cuando vivia, murio de cancer cuando yo estaba compitiendo. No... No conozco a ningun Tony, ni se que pueden querer de mi. Ni siquiera puede despedirme de el estaba en las olimpiadas. TEngo una foto de el en mi cartera, si quieres te la enseño.

Me levanto y saco el monedero, junto a las tarjetas hay varias fotos, una es mia con las compañeras del equipo y un hombre que podria ser el entrenador. Una con mi primo de hace poco, y una con mis padres. La tiendo esa para que le vea



--Es mi padre Sven Swartz, la mujer en mi madre, es de cuando comence a competir, siempre la he llevado conmigo, me da suerte.

Me callo al escuchar el telefono y la miro como contesta y se prepara para irse, niego acercandome

--¿Que ocurre? yo... no voy a quedarme aqui esperando a que vuelvas. Si dices que soy una cazadora, te acompaño, quiero que me expliques que es eso de no tener interruptores. Y quiero saber quien es ese Tony para saber que tiene en contra de mi familia. Pero si no te importa

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Vale puede que no sea muy abogado, pero echale algun año. XD

Proximamente pondre las fotos de papa y mama en la seccion ficha...

-Hace apenas unas horas estuviste a punto de morir, ¿de verdad quieres ir?
Ciertamente me gustaría algo de compañía, si esa decisión que tienes al hablar, la puedes usar para partir demonios no veo problema para que me acompañes, incluso podría enseñarte una cosa o dos.
Toma tus cosas, saldremos en seguida, tengo un pista que podría ser crucial-

Anastacia sale de la habitación busca en la sala da un par de vueltas hasta
que encuentra las llaves del coche, camina un par de pasos y llega al bife de la sala para de uno sus cajos sacar una Eagle (menuda fiera es esta tía), sin decir palabra camina directo a la puerta del apartamento,
quita todos los seguros que protegen la casa, al terminar abre la puerta y te dice:


-muévete niña, que no te pienso esperar toda la noche, mejor será que estés despierta y con tus 5 sentidos, que no pienso salvaros de nuevo.-


Al decirlo tenía una cara adusta e intolerante pero por una fracción de segundo te regalo una sonrisa de amabilidad.


Las dos bajan las escaleras y llegan al coche, ingresan en él y eres testigo de cómo maneja Anastacia, ciertamente no es merecedora del premio al mejor conductor, el tacómetro no baja de 120 kms, toma las curvas tan cerradas que piensas que se van a estrellar en cada recodo, sin embargo, ella maneja con mucha tranquilidad, parece que incluso disfruta manejar a estas velocidades.


De repente un frenazo te indica que han llegado al lugar; sin medir palabra se bajan del vehículo, Anastacia cierra el coche y te entrega las llaves.


-Si ves que se complica huye lo más lejos que puedas.-


Dicho esto comienza a caminar con intensión de adentrarse en el interior de un callejón mientras con la mano derecha empuña la Eagle.

Sonrio ante sus palabras y asiento mientras cojo el arco y las flechas poniendomelas a la espalda y siguiendola.

--No te preocupes, me pillaron la primera vez, ahora no me pillaran y estoy desenado que me enseñes a hacer algunas cosas. Creo que lo de crear fuego me ahorrara usar cerillas si empiezo a fumar digo medio enbroma mientras saca el arma que la verdad no la veo que la pegue mucho y ademas esa mirada ya la he visto antes cuando salgo a competir, es la mirada de concentracion

Mientras conduce intento no agarrarme al salpicadero, creo que me estoy poniendo blanca, conduce como una loca y espero que el cinturon me salve si...ese pensamiento desaparece al llegar. Salgo y estoy a punto de besar el bendito asfalto, pero no me aguanto y me mantengo firme. Cojo las llaves y me las quedo mirando antes de guardarlas en el bolsillo bien a mano por si acaso

--Eso ya lo veremos, creo que se tendra que ver.

La sigo un par de pasos atras con una flecha montada pero no tensada y alerta por si hay alguien esperandonos en el lugar, si atacan estare preparada.

Anastasia deja de caminar da media vuelta y te mira fijamente.

-es algo un poco complejo, pero si al menos tienes una leve indicación es posible que dejes
de ser una cazadora sin interruptores-


Anastasia se acerca a ti, usa la mano libre para apuntarte con los dedos índices y corazón al mismo tiempo, con ellos te da un pequeño golpe en la frente y otro sobre el pecho izquierdo justo en el corazón.

-para encender el fuego divino, debes tener plena confianza en ti misma, no puedes flaquear ni
sentir duda, tu misión es más importante que cualquier cosa, y además debes sentir la ira celestial fluyendo desde tu corazón ya que este es el combustible que alimentara tu fuego, sé que no es algo que se pueda entender en un segundo y menos con la premura que tenemos, pero créeme si logras articular lo que
acabo de deciros lograras encender esas flechas y todo cuanto quieras.-


Sin decirte nada mas Anastasia se gira y se interna en el callejón, caminas tras de ella cuando puedes ver en el suelo un pequeño reloj de mano, te agachas a recogerlo y compruebas con gran incredulidad que es el reloj de tu madre, el que nunca se quita al salir de casa, el mismo reloj que tantas veces le has querido cambiar por feo y viejo y que ella se niega por que le tiene gran cariño; estas a punto de desechar la idea argumentando que pueden haber muchos relojes similares cuando escuchas a lo lejos.

-Parece que la hija de Swart quiere jugar-

Desesperada buscas el origen de esa vos y puedes ver en una ventana del edificio continuo la silueta de un hombre al que le brota una hebra de sangre de la boca; estas por gritarle algo cuando ves que con una mano sujeta fuertemente el cabello de tu madre y la arrastra hasta la ventana para que puedas verla.

-qué esperas niña, tu madre te está llamando.-

Puedes ver las lágrimas correr el rostro delicado y cansado de tu madre, ella clama por su vida aunque sabes que preferiría morir antes de ponerte en peligro.

Sus palabras son extrañas e intento razonarlas, no se si podre comprenderlas ahora pero espero conseguirlo. Lo unico que saco en claro es que tiene que salir de mi interior. Bueno menos es nada, un reflejo del suelo me hace que me agache y coja un reloj, es igual al que le regalo mi padre a mi madre, pero ella nunca se separaria de el

Una voz, levanto la mirada y le veo ahi en una ventana tiene a mi madre, la va a matar. Su rostro con las lagrimas, la sangre que le corre a el por su labio.
Siento como en mi interior algo estalla, como se resquebraja algo, fuego que me abrasa, me embota los sentidos

--Si tantas ganas tienes de jugar, baja aqui a probarlas-- le replico mientras el fuego comienza a arder mas a iluminar mi mirada, creo que si pudiera. Cierro los ojos y los vuelvo a abrir mirandole a el, mi arco se despliega en un segundo, una flecha se forma a la vez y vuela hacia el impactandole en la frente en el momento que estalla en llamas para quemarle mientras corro para poder poner a mi madre a salvo. Ojala llegue Anastasia antes que yo, no quiero que muera, me va a tener que contar que es lo que hacia mi padre para que me quieran matar.

No sabes que pasa, tu rabia interior es tal que sientes como un fuego terrible te corroe las entrañas, abres los ojos y ves como una flecha que lanzas está cubierta en llamas, tu rabia y determinación es tal que no piensas en el peligro que acabas de poner a tu propia madre, el sujeto la tiene frente a si cerca de la ventana para que la pudieras ver y al mismo tiempo para ser escudo de lo que le pudieses lanzar, haces una oración en silencio para que todo salga bien y PAAFF, una pequeña explosión con algo de chispas es generada en el momento que tu flecha alcanza el lugar, te fijas pero no puedes ver con claridad, no sabes si le atinaste al sujeto y más importante no sabes el estado actual de tu madre, puedes ver una pequeña puerta abierta que deja ver unas escaleras, probablemente suban hasta el lugar donde está tu madre y ese sujeto; por ahora no hay noticias de Anastacia, parece ser que te tomo algo de ventaja.